Aproximadamente 2.300 empleados de restaurantes de McDonald’s llegaron a un acuerdo con la franquicia Crawford Restaurant Group, el dueño de varios restaurantes en Nueva York. La demanda fue presentada en la corte federal por los trabajadores en 2013 y alega que McDonald’s no pagó a sus empleados por todas las horas trabajadas, no les pagó las horas de “overtime”, y también violó otros hechos bajo la Ley Federal de Normas Laborales Justas (FLSA) y la Ley Laboral de Nueva York (NYLL). El acuerdo fue aprobado por el juez federal Andrew T. Baxter el 9 de diciembre de 2014 quien ordenó que McDonald’s pague sueldos retroactivos y daños a los empleados que trabajaron en las localidades de McDonald’s de Crawford Restaurant Group entre el 6 de mayo del 2007 y el 13 de mayo del 2014. La suma total del pago de liquidación se ha mantenido confidencial.