Un juez federal en Manhattan encontró que el dueño de los restaurantes Kum Gang San, Ju Sung Yoo, transfirió ilegalmente sus propiedades a su esposa para no tener que pagar una sentencia de $2.7 millones a 11 trabajadores latinos y asiáticos por robo de salarios. La demanda, que fue iniciada por los empleados en el 2012, acusa al restaurante de violar las provisiones de horas extras, salario mínimo, y periodo de horas bajo la Ley de Normas Justas de Trabajo (FLSA) y la Ley Laboral de Nueva York (NYLL).
Los trabajadores fueron representados en ambos casos por abogados de los grupos Asian American Legal Defense and Education Fund (AALDEF) y LatinoJustice PRLDEF. Ken Kimerling, el director legal de AALDEF, y abogado principal del caso, dijo: “Esta es la primera vez que una corte reconoce el derecho del trabajador a usar las leyes de transferencia ilícita de bienes para recuperar dinero otorgado en un veredicto en un caso de robo de salarios, sin importar si la transferencia sucedió antes del inicio del caso.” En los últimos diez años, el numero de casos de robo de salarios iniciados por empleados ha crecido. Al mismo tiempo, Kimerling dijo: “recuperar dinero de veredictos en los cuales empleadores esconden sus bienes para evitar pagar a sus empleados se ha hecho aún más difícil. Al permitir que los trabajadores anulen transferencias de bienes que sucedieron antes de que sus casos de robo de salarios hayan empezado, ellos podrán preservar su derecho de cobrar salarios y daños retroactivos cuando ganen un juicio”.
Los ex-empleados asiáticos y latinos de Kum Gang San, trabajaban regularmente horarios de 12 horas, sin descanso, 6 o 7 días por semana, y sin pago de horas extras. El restaurante también se quedaba con parte de las propinas de los empleados, y despedía a trabajadores que no se “ofrecían” a cultivar vegetales en la granja de un amigo del dueño. Cuando el Sr. Yoo se enteró que algunos empleados lo estaban demandado, el restaurante amenazó a los trabajadores con deportarlos. En marzo 2015, después de un juicio de 4 días, el juez magistrado Michael Dolinger publicó una opinión de 161 paginas declarando que Kum Gang San había pagado a sus empleados menos de lo debido por ley, y otorgó $2.7 millones a los empleados.
“Estamos muy contentos de que el Juez Federal de SDNY, Robert W. Sweet, haya visto las trampas financieras del empleador, que fueron diseccionadas, escrutadas y ahora revertidas. Este veredicto de pagos atrasados por fin será realizado. Este pago representa un momento justo, alegre e histórico para nuestros clientes inmigrantes y sus familias,” comentó Jackson Chin de LatinoJustice.
Kimerling agrego, “Esta es una importante victoria para los trabajadores que han sido pagados mal por sus patrones. Los daños obtenidos en estas demandas de robo de salarios son considerables. El dueño y los otros responsables por el mal pago serán perseguidos, sus transferencias de bienes serán anuladas, y serán forzados a pagar estos salarios y las penalidades que deben.”